Los coches eléctricos usados con garantía ofrecen un equilibrio entre asequibilidad y tranquilidad, permitiendo a los compradores disfrutar de los beneficios de la movilidad eléctrica sin el riesgo de costos inesperados de reparación. Muchos fabricantes ofrecen programas de vehículos certificados usados (CPO, por sus siglas en inglés) para coches eléctricos usados con garantía, como los vehículos CPO de Tesla, que incluyen una garantía de 4 años/50.000 millas que cubre componentes de la batería y del tren motriz, asegurando que las piezas clave estén protegidas. El programa CPO de Nissan para modelos Leaf usados incluye una garantía en la batería (hasta 8 años/100.000 millas desde la compra original), una ventaja importante para coches eléctricos usados con garantía, ya que las baterías son un componente crítico y costoso. El Chevrolet Bolt EV, cuando se compra como un coche eléctrico usado CPO con garantía, viene con una garantía de tren motriz de 6 años/100.000 millas, ofreciendo seguridad para el motor y los sistemas eléctricos. Las garantías de terceros son otra opción para coches eléctricos usados que no tienen cobertura del fabricante, con planes que cubren baterías, cargadores y componentes eléctricos, aunque varían en alcance y costo. Al buscar coches eléctricos usados con garantía, revise la duración de la garantía, las piezas cubiertas y cualquier deducible, asegurándose de que se ajuste a sus necesidades. Estas garantías reducen el riesgo de poseer un coche eléctrico usado, haciéndolos más accesibles para compradores preocupados por los costos de reparación.